De Säntis al Kilimanjaro: ¡lo conseguimos!
Los fundadores de Joya, Karl y Claudio, pasaron 6 noches y 7 días en su viaje y ¡lo lograron! ¡Subieron el punto más alto del Kilimanjaro, la cumbre del Uhuru a 5'895 metros!
Era poco después de la medianoche cuando ambos emprendieron la última etapa del Kilimanjaro. El mercurio marcaba 15 grados bajo cero y el viento huracanado permitía sentir una temperatura de hasta 25 grados bajo cero. Había que dominar unos 1.200 metros de altitud y seis kilómetros; era un gran reto.
Karl Müller echa la vista atrás a la ascensión: "A 5'000 metros sólo te mueves en modo time lapse, la falta de oxígeno me hacía sentir como si estuviera borracho y la concentración sólo era suficiente para un paso tras otro".
Cuando por fin llegaron a la cima, se vieron recompensados con un magnífico amanecer: fue impresionante y ambos se emocionaron hasta las lágrimas.
Tras una breve estancia, el descenso de la montaña ya estaba en marcha, ya que a esta altitud se pueden sufrir fuertes dolores de cabeza y fiebre de altura. Así que, 1 día después estaban de vuelta al pie del Kilimanjaro.
Al final, los dos regalaron sus zapatos Joya a los porteadores y guías de montaña locales. Las zapatillas con la nueva tecnología Active, que se iba a probar en el ascenso, ofrecían la mayor comodidad en todo momento y, gracias a sus propiedades de suavidad y elasticidad, un descenso indoloro.
Karl y Claudio con sus guías.
Sin zapatos, pero llenos de asombro, orgullo y gratitud, el viaje terminó en el autobús y Karl Müller y Claudio Minder se dirigieron a casa.
¡Qué aventura!